INDIGNADO ACTIVISTA, REBELDE SOLAR Y RADICALMENTE DEMOCRÁTICO

jueves, 16 de agosto de 2018

Adelante Andalucía, tiempo de reflexión y debate para EQUO Andalucía Verdes

Una vez leído el informe de la Comisión de Cooperación Política de EQUO Andalucía Verdes, encuentro que a fecha de hoy, existen muchos factores relevantes sin concretar, que pudieran afectar a la votación que inicia hoy, sobre la inclusión de EQUO Andalucía Verdes en el nuevo sujeto político andaluz Adelante Andalucía.


Teniendo en cuenta que si bien ciertas premisas emanadas de la voluntad de la afiliación en la Conferencia Política, parece se cumplen, no es menos cierto que algunas cuestiones del informe nos pueden llevar, por la poca concreción, a vivir situaciones inciertas en el futuro cercano.

Que el nuevo sujeto político se concrete en una opción electoral en coalición es positivo, así como que la imagen de cada colectivo político sea visible y visibilizada, pero no lo es menos el porcentaje asignado a cada partido en la misma, no sólo a efectos de reparto económico, sino también a la elaboración de listas electorales.

El retorno de los gastos de campaña es algo incluido en los préstamos que a una coalición se asignan desde cada colectivo, si se obtiene como es previsible, representación con cargos electos de dicha coalición, pero las aportaciones del dinero del grupo parlamentario, deben quedar expresadas en el documento que EQUO Andalucía Verdes firme, y ese dato debe ser previamente conocido antes de votar.

Si se repite un 5% como en la coalición federal Unidos Podemos, o es mayor o menor el porcentaje, es un dato que ayuda a tomar posición a la afiliación.

Y no sólo eso, el trabajo postelectoral debe incluir la visibilización de nuestra marca y la presencia dentro del grupo creado para la toma de decisiones en los siguientes 4 años, (Junta Directiva de la Coalición), así como la presencia en el grupo parlamentario de personas de EQUO Andalucía Verdes a cargo del grupo.

Y estos dos elementos, no se concretan en la denominada coordinadora del grupo parlamentario, que no sólo debe existir para resolución de desacuerdos, sino para el trabajo conjunto de estrategia y comunicación políticas, a través de al menos una persona asignada a EQUO Andalucía Verdes en el trabajo diario del grupo.

Siendo valorado positivamente el trabajo conjunto a nivel programático a través de la figura denominada “patios”, en la que seguro las gentes de EQUO Andalucía Verdes aportarán la calidad que atesoran, no es menos importante la presencia en puestos con opciones a ser cargo electo, si bien ello dependerá del resultado electoral que la ciudadanía otorgase a la coalición, la calidad en la aportación en el trabajo programático bien vale para “asegurar” en las primarias conjuntas, una posición de salida, que ofrezca una real diversificación de las opciones de voto al electorado. De otra manera no tendría sentido construir una casa común, como pretende ser la coalición, si finalmente sólo dos de sus inquilinos copan todas las opciones en las listas.


Y leyendo el documento, se expresa que es un “objetivo a concretar en la lista de consenso de primarias”, lo cual tampoco ayuda a tomar una decisión en la futura votación. 


Por todo ello, mi opinión personal es que resulta mejor para nuestro colectivo despejar previamente a la votación, la mayoría de las incógnitas aún pendientes, resultando de ello unas decisiones de este calado más acertadas, con premisas concretas, que con opciones que pueden o no ser finalmente aceptadas, siendo la abstención activa, una respuesta que surge a la pregunta formulada sin bases concretas para posicionarnos; entendiéndose como abstención activa, la posibilidad que dispondrá la afiliación en la herramienta de votaciones junto al sí y al no, como en anteriores plebiscitos.

En caso que dicha opción fuese la respuesta mayoritaria, nos abogaría a seguir el trabajo mandatado desde la Conferencia Política, para confluir con unas premisas claras y concretas, y es por ello que me permito en este mi humilde blog, sugerir que primero se despejen las incógnitas escritas en naranja en el texto que acompaña el correo, y posteriormente demos paso a la votación que decidirá nuestro futuro a corto plazo, basado en hechos ciertos y no en tantas dudas sobre temas diversos e importantes para tomar la decisión favorable o contraria a nuestra inclusión en el espacio político Adelante Andalucía.

Es palmario que la búsqueda de confluencias fue aprobada en la Conferencia Política, y en ello se trabaja y bien desde la Comisión elegida entre todas.
Por ello también se aprobó en Mesa Andaluza participar en el grupo motor de Adelante Andalucía, y allí también se está trabajando bien por parte de las personas designadas.
Por todo ello lo único que falta es tiempo para que ese buen trabajo fructifique en unos acuerdos ( o desacuerdos) que permitan a la afiliación decidir si estar en el nuevo sujeto político andaluz o no.
Los espacios se construyen desde la base o terminan agrietándose, y es por ello que marcar nuestros tiempos se antoja esencial en estos momentos, tan cruciales para la transformación del modelo productivo, energético, fiscal, económico y político.
En la mesa andaluza de julio se acordó iniciar la composición del Comité Electoral de EQUO, precisamente para manejar en paralelo las dos opciones, el sí y el no, de manera que no quedemos fuera del tablero político.
Sin embargo no se ha avanzado en ello desde hace mes y medio que se mandató crear dicho Comité Electoral, necesario sea cual sea el resultado de la consulta.
Esas y otras cuestiones, son las que nos llevan a las prisas por tomar decisiones que deben ser reflexivas, debatidas en tiempo y forma, y finalmente votadas.
Hasta el 8 septiembre no se conformar los primeros borradores programáticos, y siempre podremos votar durante 5 días antes de esa fecha, con las premisas claras y precisas.
Simplemente abogo por darle a la Comisión dos semanas más de plazo para tener más luces que sombras en la decisión.

De ello deriva mi abstención activa, que nuevamente apunto como mi opción de voto en esta consulta, sin conocer los detalles de nuestra posible participación en el nuevo sujeto político Adelante Andalucía.

miércoles, 1 de agosto de 2018

1 de agosto 2018: La humanidad ha gastado todos los recursos naturales que la Tierra puede reponer en un año

Me cuesta repetir posts en mi blog, pero hoy me toca realizar dicho ejercicio, al conocer la noticia que refleja el titular.



La huella ecológica es un indicador del impacto ambiental generado por la demanda humana que se hace de los recursos existentes en los ecosistemas del planeta, relacionándola con la capacidad ecológica de la Tierra de regenerar sus recursos.

En el año de mi nacimiento 1966, la humanidad consumía alrededor de sólo 2 tercios de los recursos naturales disponibles en todo el Planeta. 

El año 1986 fue el último año de equilibrio entre lo que consumimos y dicha regeneración propia.

En 1995 el 21 de noviembre fue la fecha en la que terminamos con todos los recursos.

En el año 2000 consumimos los recursos disponibles el día 1 de octubre.

En 2014 ya los consumimos el 19 de agosto. 

Y este año 2018, hoy 1 de agosto, la humanidad, sobre todo las personas que vivimos en las zonas más ricas del Planeta, hemos gastado todos los recursos naturales que la Tierra puede reponer en un año. 

De aquí a final de año, viviremos a expensas de las generaciones futuras, endeudándolas sin derecho alguno.



Debe ser que no ha interesado mucho saber el precio de una ave, un reptil, una retama o un mamífero, es más, me atrevería a decir, vistos estos datos, que la vida humana se valora en este sistema, por la capacidad de producir y consumir que tenemos como individuos, y no por el simple hecho de ser una persona humana.
Necesitamos casi tres Españas para mantener nuestras necesidades de consumo y si el resto de seres humanos vivieran con el mismo modelo como el que vivimos hoy en España, necesitaríamos 2,1 planetas Tierra para sostener este sistema.




Esto no significa que a partir de mañana no tengamos alimentos, agua, energía o materias primas disponibles, significa que, a partir de mañana dichos recursos los estaremos tomando “prestados” de los recursos que necesitarán las futuras generaciones de nuestra especie para sobrevivir.

Aparte del egoísmo implícito que supone esta situación a nivel moral, el colapso civilizatorio que prepara este escenario, es contrario a lo que cualquier especie tiene firmemente anclado en su carga genética: reproducirse procurando los recursos necesarios a sus descendientes para poder perpetuar su especie.

Estamos inmersos en una profunda crisis que es económica, política, social y ambiental. En suma una crisis sistémica y civilizatoria que amenaza  nuestra supervivencia directamente y  choca contra los límites del planeta, debido a  la quiebra del crecimiento infinito como modelo a perpetuar.


Nuestros gobiernos renuncian a las políticas medioambientales, como si la naturaleza no fuese el sustento de la economía y de la propia vida.

Renuncian a hacer frente al cambio climático y la desertización,  parando en seco la transición hacia las energías renovables.

Gobiernos que no han tomado lecciones de los errores del pasado y siguen profundizando la agresión al paisaje y el territorio, continuando inversiones en grandes infraestructuras para el automóvil, trenes de alta velocidad, manteniendo vigentes los planes urbanísticos desarrollistas que multiplican el suelo ya urbanizado, y poniendo en marcha la legalización y consolidación del fenómeno de urbanización ilegal que ha dejado crecer sin control en las costas españolas.

Gobiernos que no hacen nada para revitalizar los ríos que estamos dejando morir.

Gobiernos que no hacen nada efectivo para detener la erosión y contaminación de nues­tros suelos fértiles y nuestros acuíferos; que no hace nada por disminuir la pérdida de calidad de nuestro aire, la contaminación acústica, lumínica y electromagnética. 

Gobiernos que no frenan, sino todo lo contrario, la plantación en nuestros suelos de alimentos modificados genéticamente, convirtiendo a España en un laboratorio de las empresas multinacionales dedicadas a dicho negocio como Monsanto, Syngenta o Bayer.

Gobiernos, que como el andaluz, quieren volver a aplicar la extracción de gas por métodos de inyección de líquidos contaminantes en el subsuelo,(Fracking), en vez de prohibirlos por y para siempre.

Así las cosas. La Tierra no entiende de apuestas de casino ni de regateos de comerciantes avezados.

                                         
                            ¿Actuamos? ¿O esperamos al colapso? 
                               Cuidemos el lugar dónde vivimos.
     
COMO NO HAY PLANETA ALTERNATIVO,DEBEMOS BUSCAR MODELOS ALTERNATIVOS, Y LA ECOLOGÍA POLÍTICA LO PROPONE Y EQUO LO DEFIENDE EN LAS INSTITUCIONES Y EN LA CALLE